Nos tienen tan acostumbrados al retraso de su disponibilidad para disfrutar del deporte blanco que ya estamos excesivamente dispuestos a aceptar que la estación de Manzaneda no va a ser disfrutable comunmente año tras año.
A favor estamos ,los que pensamos , que es un privilegio contar con unas instalaciones sobradamente dotadas de medios mecánicos para la práctica del esqui de pista cerca de nuestros domicilios.
Posiblemente falte ,quien diseñe de una vez por todas , la estrategia necesaria para exprimir el limón todo lo deseable para que aceptemos que la estación de Manzaneda es nuestro parque temático de los deportes de invierno y también en las otras estaciones del año.
Aprovechen ,los gestores de Manzaneda , los cañones de nieve recientemente instalados,trabajen por la noche con temperaturas adecuadas cuando el dia no las garantice,desplacen nieve tan acumulada en los pinares a las pistas,rasurenlas,canalicen las aguas, potencien modalidades de esqui , como el esqui de fondo, que se adapten facilmente a innivaciones ligeras , etc. etc...
Pero sobretodo, faciliten el disfrute da la nieve a todos los posibles usuarios de sus instalaciones.
Sabemos que lo pueden hacer.
Dótense de gestores que sepan de la nieve y los deportes de la montaña y déjense de gerentes aficionados al automobilismo y a la hosteleria más cutre, que además desconocen y son ajenos el mundo de la montaña y los deportes de aventura y del turismo activo.
Nosotros creemos en este parque temático de la montaña ourensana ,que es la estación de montaña de Manzaneda ,por que somos herederos de los pioneros que la crearon y mantenedores de su espíritu a través del club que generó este sueño que sigue existiendo tras casi cincuenta años de historia, el Club Alpino Manzaneda- Club Alpino Ourensan.
Afortunadamente su casa-refugio de Pena do Caldeiro nos sigue brindando calurosa acogida en el centro de las mejores pistas de la estación de esqui.
Hacerle una visita amig@s y recuperareis los sueños de las montañas.
1 comentario:
Teño moitas ganas de voltar ao refuxio; ainda que non esté o Eduardo e as dúas mulleres de Covas ao mando da cociña, con aqueles caldos de avecrem que sabían a gloria e os sandwiches que para min eran un auténtico luxo.Voltarei.
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